Nena Arias | 21 de febrero de 2022
“Entonces la serpiente dijo a la mujer: —Ciertamente no morirán. Es que Dios sabe que el día que coman de él, los ojos les serán abiertos, y serán como Dios, conociendo el bien y el mal”.
(Génesis 3:4-5)
El pasaje anterior nos dice que continuamos viendo esta mentira de Satanás perpetrada aún hoy. Continúa haciendo creer a la gente que son dioses que pueden desafiar a Dios Todopoderoso y crear cualquier realidad que quieran con solo decidir hacerlo.
Solo pensar en algo lo suficientemente difícil ¿va a cambiar la realidad? ¿Tiene la mente humana ese tipo de poder? Cualquiera con un poco de cerebro diría que no, y estaría en lo cierto. Puedo pensar todo lo que quiera que soy multimillonario, pero solo pensarlo no me hará uno. Sin embargo, esa es la premisa en el razonamiento que muchos usan para convencerse de que realmente han cambiado su realidad con solo pensar que lo han hecho. La parte aún más loca de esto es que están convenciendo a gran parte de la sociedad de este engaño de que en realidad han logrado cambiar lo inmutable y ahora tenemos que aceptar sus falsedades y ajustar nuestro trato hacia estas personas. Un ejemplo de esto es el hombre biológico que ahora quiere convertirse en una “mujer” y quiere que la sociedad lo trate como mujer a pesar de que cambiar el género biológico es imposible. También hay muchas mujeres biológicas que deciden que ahora quieren hacer la transición a hombres, y debemos tratarlas en consecuencia.
El ataque que viene contra todo lo que conocemos como normal, o la realidad, continúa escalando en fuerza y agresión, nos guste o no. Por ejemplo, a la mayoría de los usuarios de iPhone les gusta la comodidad de un iPhone de Apple. Los iPhones son un producto extraordinario de nuestro tiempo. Pero, ¿has escuchado lo último que Apple iPhone está anunciando la llegada de nuevos emojis para representar a la gente fuera de lo común? Un ejemplo de estos emojis son sobre «hombres embarazados» o «personas embarazadas». De hecho, algunos medios de comunicación o artículos de revistas informan que hay algunos «hombres que quedan embarazados». La sociedad está aceptando esta falsa realidad que se está creando y repitiendo una y otra vez hasta convertirse en la “realidad” de algunas personas. Realmente están creyendo que esto es posible.
El campo de la medicina sabe perfectamente que el género biológico no se puede cambiar con hormonas, cirugía, maquillaje y vestimenta. Pueden cambiar la apariencia física de alguien, pero nunca su género biológico. La realidad es que hay CERO hombres que quedan embarazados. Sin embargo, aquellos de nosotros que creemos esto somos etiquetados como «intolerantes y odiosos». Somos condenados al ostracismo por no querer cumplir con estas falsas realidades que se están creando en la mente de las personas.
Los maestros de escuelas públicas y los profesores universitarios han perdido sus empleos porque se negaron a dirigirse a un hombre o una mujer biológica con los pronombres incorrectos con los que esas personas ahora quieren ser dirigidas porque creen que han cambiado con éxito su género biológico. Este es un claro ejemplo de cómo las personas están intentando crear su propia realidad que resulta ser una gran falsedad.
Cómo piensas no determina la realidad. No puedes simplemente manipular tu pensamiento para crear una nueva realidad para ti e intentar normalizarla. Al hacerlo, es un ataque directo a Dios el Creador y su verdad porque no podemos cambiar la moral, la ética, los valores, los principios o la estructura de la creación. No tenemos ese poder. Tu forma natural de pensar es antagónica a la cosmovisión bíblica y la capacidad humana es limitada.
Entonces, todas estas redefiniciones necias de la vida, la familia, los géneros, etc. son meras suposiciones humanas y malos intentos de crear nuevas realidades que solo existirán en sus cabezas pero que no funcionarán en la vida real. A la gente le gusta jugar a ser Dios al igual que Satanás (la serpiente) convenció a Eva de que eso sucedería: “Dios sabe que el día que coman de él, los ojos les serán abiertos, y serán como Dios” (Génesis 3:4-5).
Nunca le creas al padre de la mentira ni te cruces a su lado. Jesús dijo esto acerca de los que creen y justifican las falacias:
“Ustedes son de su padre el diablo, y quieren satisfacer los deseos de su padre. Él era homicida desde el principio y no se basaba en la verdad porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de lo suyo propio habla porque es mentiroso y padre de mentira.”
(Juan 8:44)