Nena Arias | 5 de marzo de 2018
¿Qué tan mal es la falta de vivienda en Estados Unidos? ¿Qué tan deficiente puede ser?
La definición oficial de personas indigentes es cuando un individuo carece de vivienda permanente y tiene que hospedarse en albergues, edificios o vehículos abandonados, en las calles o en otras situaciones inestables. También pueden ser considerados sin hogar si tienen que albergarse con amigos o miembros de la familia extensa porque no pueden proporcionar su propia vivienda.
Cuando consideras cuánto dinero hay en Estados Unidos, la falta de vivienda parece aún más absurda. Pero la acusación más atroz contra los Estados Unidos a la indigencia es el hecho de que se considera una nación cristiana y la Palabra de Dios nos instruye que debemos ayudar a los necesitados.
Estados Unidos es un país rico. Solo para ponerlo en perspectiva, durante años California ha amenazado con separarse de la unión. Incluso si California se separa de los Estados Unidos, tendría el octavo PIB (producto interno bruto) más grande de todos los países del mundo.
Dependiendo de dónde vives en todo el país, puedes tener diferentes ideas sobre cuán extendida está la situación de las personas sin hogar en este país. Es por eso que las estadísticas pueden ayudar a poner las cosas en perspectiva.
La Alianza Nacional para Terminar con la Indigencia declara que hay 564,708 personas sin hogar en una noche determinada en los Estados Unidos. 36,907 (6.38%) son niños, 47,725 (8.33%) son veteranos y 269,991 (47.6%) están incapacitados e incapaces de trabajar. Alrededor de 1.56 millones de personas, o alrededor del 0.5% de la población de EE.UU., usaron un refugio de emergencia o un programa de vivienda de transición entre el 1 de octubre de 2008 y el 30 de septiembre de 2009. La falta de vivienda en Estados Unidos aumentó después de la Gran Recesión.
¿Cuál es la causa número uno de personas sin hogar en los Estados Unidos? Para las mujeres, la violencia doméstica es la causa principal de la falta de vivienda. El país informa que las causas principales de la falta de vivienda entre las familias son: (1) falta de vivienda accesible, (2) el desempleo, (3) la pobreza y (4) bajos salarios, en ese orden. En una sola noche en enero de 2015, por ejemplo, 564,708 personas fueron consideradas personas sin hogar en Estados Unidos, según la Alianza Nacional para Terminar con la Indigencia. Eso es más de medio millón de personas sin un techo sobre sus cabezas cada noche.
Algo que me rompe el corazón es cuando muchos veteranos quedan sin hogar después de arriesgar sus vidas por el país, pero no tienen mucho que mostrar por ello al salir del ejército. Muchos veteranos caen en la falta de vivienda o la pobreza porque las habilidades que aprendieron en el ejército no son transferibles a la fuerza de trabajo civil. El trastorno de estrés postraumático, conocido como PTSD por sus siglas en inglés, y el abuso de sustancias contribuyen a los problemas que conducen a la falta de vivienda o al riesgo de quedarse sin hogar para los veteranos. En mi opinión, es vergonzoso que nuestro país permita que esto suceda, ¡especialmente cuando pagamos impuestos tan altos para nuestros veteranos!
Las Sagradas Escrituras nos dicen que siempre es más bendecido dar que recibir (Hechos 20:35). A los cristianos se les ordena dar siempre a los desamparados y necesitados y hacerlo con alegría. Dios ama al que da con alegría, 2 Corintios 9:6-7, “Y digo esto: El que siembra escasamente cosechará escasamente, y el que siembra con generosidad también con generosidad cosechará. Cada uno dé como propuso en su corazón, no con tristeza ni por obligación porque Dios ama al dador alegre”.
“Porque no faltarán necesitados en medio de la tierra; por eso, yo te mando diciendo: Abrirás tu mano ampliamente a tu hermano, al que es pobre y al que es necesitado en tu tierra”, Deuteronomio 15:11.
Los cristianos deben ser bondadosos y amorosos con todos, incluso con nuestros enemigos. Si lo tenemos y un hombre pobre pide algo y no ayudamos, ¿cómo podemos decirle del amor de Dios en nosotros y que Dios lo ama?
Siempre debemos buscar formas de hacer el trabajo que el Señor nos ha ordenado que hagamos, en esto el mundo verá el amor de Dios a través de nuestras buenas obras y glorificará a nuestro Padre celestial.
«¿Cómo es el amor? Tiene las manos para ayudar a otros. Tiene los pies para ir a los pobres y necesitados. Tiene ojos para ver la miseria y el deseo. Tiene los oídos para escuchar los suspiros y las tristezas de los hombres. Así es como se ve el amor». ~Augustine~