Juez federal falla a favor de los centros de embarazo pro-vida en Austin, Texas

Bethany Monk | 24 de junio de 2014

El lunes, un juez federal suprimió una ordenanza que requiere que los centros de embarazo en Austin, Texas, coloquen letreros con información escrita de antemano. En su fallo, el juez de distrito de EE.UU. Lee Yeakel dijo que la ordenanza era «nula por vaguedad», y que la ciudad no puede hacerla cumplir.

Jonathan Saenz, un abogado del Institute Liberty [Instituto Libertad], dijo que la ciudad trató de intimidar a los centros de embarazo sin fines de lucro, «con un desprecio total hacia la libertad religiosa y la libertad de expresión».

«La Ciudad de Austin fue advertida por los expertos jurídicos y la forzaron a través del proceso de todos modos», dijo. «Esta victoria es una declaración fuerte que los centros pro-vida estaban en lo correcto y que el juicio legal de la ciudad no se puede confiar».

La ciudad aprobó la ordenanza en 2010 para restringir la operación de lo que llama «Centros de Embarazo de Servicio Limitado», de acuerdo con Texas Values [Valores de Texas]. Estos centros ayudan a las mujeres embarazadas para que llevan su embarazo a término. No ofrecen abortos ni proveen referencias a los abortistas o lugares con supuestos servicios integrales de control de la natalidad.

La ordenanza requiere que estos centros pro-vida «muestren en un lugar sobresaliente» dos letreros – uno en inglés y otro en español – en sus entradas. Los letreros tenían que indicar:

Este centro no ofrece abortos ni recomienda a proveedores de aborto. Este centro no ofrece ni recomienda a los proveedores del Food and Drug Administration de EE.UU. de drogas anticonceptivas y dispositivos médicos aprobados.

Los centros de embarazo que no publicaran estos letreros estaban sujetos a multas fuertes. Los vendedores de aborto, sin embargo, no estaban obligados a publicar ninguna declaración indicando los servicios que no ofrecen. Austin LifeCare, Inc., uno de los centros de embarazo de la ciudad, presentó una denuncia en 2011.

Los miembros del Consejo luego corrigieron la ordenanza para que incluyera que todos los centros de embarazo no médicos tuvieran que poner letreros que dicen que no proporcionan servicios médicos y no tienen licencia para realizar ultrasonidos. Dichas licencias, sin embargo, ni siquiera existen.

Matt Bowman, asesor legal de Alliance Defending Freedom [Alianza Defendiendo la Libertad] (ADF), dijo que la ordenanza le da a la ciudad «una latitud peligrosa» en contra de este tipo de lugares que «ofrecen ayuda real para las mujeres».

«Los aliados políticos de los abortistas no deben estar autorizados a utilizar la ley como un instrumento para atacar a los centros de atención del embarazo», explicó él.

Jeff Mateer, abogado del Instituto Libertad dijo que está contento con la decisión de Yeakel. «El gran trabajo de estos centros de recursos para el embarazo para ayudar a que las mujeres realicen decisiones informadas», dijo, «ya no se será afectada».

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