Gary DeMar | 21 de marzo de 2018
(Godfather Politics) – Con toda certeza estamos ante una generalización apresurada cuando decimos que este grupo o aquel piensa de cierta manera. Lo más probable es que un grupo vocinglero dentro de un grupo más grande piense de cierta forma y tiene o haya obtenido una tribuna para tratar de un tema.
La más reciente tribuna que habla por los mileniales es la de la economía.
La CNN reportó la semana pasada que el 66 por ciento de los mileniales de edades entre 21 y 32 no tiene nada ahorrado para su retiro, y aunque el autor atribuía esa injusticia a los préstamos estudiantiles, los «salarios congelados» y el «alto desempleo», puede haber una causa aún más importante: muchos mileniales, honestamente, no le ven futuro a nuestro sistema económico. (Salon)
Si hay una razón por la cual nuestro sistema económico falla, es por los mileniales motivados por utopías que votan por planes económicos socialistas. Los que mata al capitalismo es la eliminación del capitalismo. Para crear riqueza tiene que haber capital. La redistribución de riquezas le quita el incentivo a la gente para dedicar tiempo y esfuerzo a crear riquezas.
Cuando los mileniales apoyan a Bernie Sanders, que quiere hacer la educación superior «gratis», son ellos los que destruyen el capitalismo. El alto precio de la educación superior es debido principalmente a que el Gobierno se involucra en el financiamiento de la misma. Si hubiera menos dinero disponible para una educación superior (tomado de unas personas para darlo a otras) los institutos tendrían que reducir sus costos.
Si falla el capitalismo, entonces ¿qué van a hacer esos mileniales cuando les llegue el momento de retirarse? Uno podría argumentar que, a su edad tan joven, el retiro está tan lejano que no hay necesidad de preocuparse por él.
Quizás podrían mudarse para Venezuela, donde el capitalismo está muerto.
Los años pasan muy rápido. Cada año que pasa sin ahorra ni cosechar los beneficios que da el capitalismo pone a una persona más lejos de la realización económica. Digamos que los padres hayan invertido $1000 el año en que nació su hijo. A un 6% de interés durante 65 años, producirían $44 145. Por supuesto, eso no es suficiente para retirarse. «Si los padres o los abuelos, digamos, depositaran $20 al mes durante 20 años, el ahorro aumentaría hasta más de $240 000 al momento de retirarse el niño».(Time)
El objetivo debe ser enseñarles a los niños, desde temprano, las bases de la economía. Si esos niños en los que se invirtió desde pequeños comenzaran a añadir a sus cuentas de ahorro cada mes, en la medida en que crece su ingreso, habrá una cantidad holgada para su retiro. Eso se llama gratificación diferida. Evitar algunos gastos en el presente para recoger más tarde los beneficios.
El ahorrar desde temprano también ayuda a vacunarlos contra el socialismo. ¿Qué sistema económico creen esos mileniales que se va a «hacer cargo de ellos» en sus años de retiro? Si no es el capitalismo, entonces ¿quién?
«Puede que el capitalismo exista [en el año 2050] pero no espero que la gente se sienta feliz con él» -dice Jon Good, un chocolatero de 34 años y propietario de un pequeño negocio -, «si el capitalismo es remplazado [para entonces] mi modelo económico ideal es uno en que las necesidades básicas sean abundantes y gratis, todo el mundo trabaje unas pocas horas a la semana en las labores necesarias para la sociedad como recogida de basura y mantenimiento de maquinaria, y después tienen el resto de sus vidas libres para dedicarse a cualquier proyecto — sea al arte, al descanso, la industria — que ellos deseen.
Esta esperanza utópica, de que podremos teóricamente terminar en una especie de social democracia completamente automatizada post-laboral fue expresada también por otros. (Salon)
¿«Todas las necesidades básicas sean abundantes y gratis»? No hay nada gratis. Es una regla básica de la economía. Alguien está pagando la cuenta. Los Gobiernos no tienen dinero. Las personas que están recibiendo cosas de gratis se están beneficiando del trabajo de otros. Estos mileniales necesitan una clase de historia.
Los intentos de implantar un sistema económico socialista en el nombre de una utopía económica han sido llevados a cabo y han fracasado. Los Peregrinos fueron organizados inicialmente como una sociedad colectivista, como mandaba el contrato con sus inversionistas que los patrocinaban. Sin importan cuánto trabajaba una persona, todos recibían la misma cantidad. No tomó mucho tiempo para que los menos industriosos se dieran cuenta que su menor trabajo les iba a producir los mismos resultados que a los más industriosos. «Todas las personas que pertenecen a esta colonia deben recibir su comida, bebida, vestuario y todas las provisiones del fondo común».
«En su History of Plymouth Plantation [«Historia de la plantación de Plymouth»] el gobernador de la colonia, William Bradford, informó que los colonos pasaron hambre durante años, porque rehusaban trabajar en los campos. En vez de eso, preferían robar alimentos. Dice que la colonia estaba infestada de «corrupción» y con «confusión y descontento». Las cosechas eran pequeñas, porque «mucho era hurtado por la noche y por el día, antes que fuera apenas comestible». (Mises Institute)
Bradford escribió lo siguiente en su relación de primera mano sobre los eventos:
La experiencia que tuvimos en esta condición y curso común, nos dio años duros…que por despojar de la propiedad y llevar la comunidad a una mancomunidad, los haría felices y florecientes, como si fueran más sabios que Dios.
Porque esta comunidad (como era hasta aquí) se vio que generaba mucha confusión y descontento, y retardaba muchos empleos que hubieran sido para su beneficio y comodidad. Porque los hombres jóvenes que eran los más capacitados y adecuados para la labor y el servicio, consideraban que gastar su tiempo y energías trabajando para las esposas e hijos de otros hombres [sin que se les pagara] era una injusticia.
Esta libre empresa tuvo un gran éxito, porque hizo que todas las manos fueran industriosas, por lo cual se sembró mucho maíz que de otra forma no los hubiera sido.
El colectivismo hace que todo el mundo sea improductivo. Si el colectivismo de Plymouth hubiera continuado, todos ellos se hubieran muerto de hambre. Lo que ocurrió en Plymouth fue intentado igualmente sin éxito en Jamestown, establecida en 1607. «En el invierno de 1609-1610, llamado “El tiempo del hambre”, la población disminuyo de 500 a 60. Entonces la colonia de Jamestown fue convertida en un mercado libre, y los resultados fueron igual de dramáticos que en Plymouth». (Mises Institute)
Si las ideas de estos mileniales son aplicadas, entonces todos nosotros estaremos muertos.